La kinesiología puede ayudar prácticamente a todo el mundo. Los métodos de test kinesiológicos ponen de manifiesto de forma sencilla los desequilibrios en los diferentes niveles del organismo, mientras que los protocolos de corrección devuelven el equilibrio a todos los sistemas del cuerpo. De esta forma, la kinesiología contribuye a activar la capacidad autocurativa del cuerpo.
Las enfermedades no son casualidad, sino que normalmente son el resultado final de una acumulación de factores de estrés que terminan por producir problemas en la distribución energética del cuerpo que, a largo plazo, se traducen en síntomas físicos.
Los factores de estrés estructurales incluyen los problemas musculares y articulares que, por su parte, comportan alteraciones en la postura corporal, dolores o simplemente un malestar general al inicio.
Los factores de estrés químicos abarcan desde carencias alimentarias, reacciones alérgicas, trastornos hormonales hasta la saturación de sustancias tóxicas para el organismo. Estos factores inciden en la bioquímica del cuerpo y son responsables de una amplia variedad de síntomas como la desorientación mental, los dolores de cabeza, trastornos dermatológicos.
Los factores de estrés emocionales se hallan relacionados con los pensamientos, convicciones, actitudes y sentimientos, tanto conscientes como inconscientes, referidos al pasado, el presente y el futuro. Todos ellos pueden ser causa de numerosos trastornos mentales y emocionales, como los estados de ansiedad, el insomnio y las adicciones.
Entre los factores de estrés electromagnéticos se cuentan las drogas de todo tipo, tanto medicamentos como drogas alucinógenas y sociales. También los aparatos electrónicos que llenan nuestras ciudades y nuestras casas. Estos afectan a los sistemas energéticos del cuerpo originando problemas de confusión, fallos en la coordinación, dislexia y otros trastornos.
La “magia” de la kinesiología radica en que el propio cuerpo es el que nos indica mediante los test musculares si existen problemas y de qué naturaleza son, dónde se encuentran y lo que el cuerpo necesita exactamente para curarse por sus propios medios. Así pues, el problema se trata desde la raíz.
La kinesiología resulta de gran ayuda en numerosos trastornos de la salud, como en los cuadros de malestar general en los que la medicina convencional no acierta a emitir un diagnóstico exacto, por ejemplo, la fatiga crónica, la falta de energía general, etc.
La kinesiología no consiste en tratar los síntomas, sino que abarca todo el sistema formado por el cuerpo como unidad, incluyendo la mente y las emociones. La lista de aplicaciones que se pueden realizar con kinesiología, para el bienestar de la persona y la recuperación de su salud, son prácticamente infinitos.
Acumular Energía para el Intento - 3er. Grupo
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Los nueve pases mágicos del tercer grupo se utilizan para trasladar a los
tres centros de vitalidad, situados alrededor del hígado, el páncreas y los
riñon...
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