Terapia Floral

La Terapia Floral del Dr. Bach ha abierto nuestra conciencia a la comprensión de que somos responsables de nuestra salud, demostrando ser el camino de transformación y evolución del hombre, cuando este acepta el desafió de convertirse en participante consciente y activo de su propia recuperación.
Si nos detenemos a observar, veremos que siempre detrás de cada malestar, hay una emoción conflictiva en la que estamos atrapados y que nos impide expresarnos como lo deseamos. Los conflictos emocionales son esos puntos críticos en los que el alma y la personalidad, libran una batalla dolorosa que degenera en muchas ocasiones en enfermedad.
La enfermedad, en este sentido, no es un mal a suprimir, sino una lección que hemos de aprender.

Las esencias florales, nos ayudan a sentir y percibir mejor nuestros conflictos, a fin de que podamos aprender de ellos y así, liberarnos responsablemente. Somos esclavos de todo aquello que no somos conscientes.
Reflexionando cuidadosamente acerca de cuáles son las emociones que nos perturban, sabremos a que esencia floral recurrir para ir sanándonos y así fluir cada vez más libremente.

QUÉ SON LAS ESENCIAS FLORALES
Son destilaciones de flores, que conservan sus cualidades energéticas gracias a su particular sistema de elaboración. Las flores reciben las energías del sol a través del aire, y las de la tierra (incluidos los nutrientes) a través del tallo y las raíces.
Como todos los seres en la naturaleza, las flores poseen su propio campo de vibración y cada flor tiene una cualidad única de energía vital que interactúa con los campos sutiles de los seres humanos.

CÓMO ACTÚAN
La función de las esencias es la de entrar en consonancia con el campo energético de la persona, cuando este se altera por algún desequilibrio emocional. La esencia permite el flujo energético para nivelar el bloqueo ayudando a armonizar y equilibrar los estados emocionales.
Es conveniente recordar que la prevención y curación de una enfermedad según el Dr. Bach “se logrará descubriendo lo que falla en nosotros y erradicando ese defecto, con el desarrollo de la virtud que lo ha de destruir”; y esto es lo que nos aporta la esencia al brindarnos una cualidad armónica: desarrollar la cualidad correspondiente y retirar lo que produce el desequilibrio.

RECOMENDACIONES
Para que las esencias no pierdan su energía vital, son necesarios algunos cuidados especiales:
• Evitar el contacto del cuentagotas con la lengua.
• El mejor momento para su toma es cuando estamos relajados, por lo que antes de dormir, y al momento de despertarse son más eficaces.
• Guardar los frascos bien cerrados en un lugar fresco, lejos de fuentes de calor (cocinas, radiadores, estufas).
• Alejar los aparatos eléctricos en uso, masas metálicas, y aparatos electrónicos que alteran la energía vibratoria de las esencias.
• No tirar las esencias que ya no se vayan a utilizar. Pueden añadirse al agua de riego de las plantas (de 1 a 3 gotas una vez por semana).
• Se pueden colocar cerca de cristales de cuarzo, los cuales con su energía ayudan a preservar y potenciar la energía de la esencia.

Debidamente utilizadas, las esencias no producen efectos secundarios o interacciones con medicamentos ya que actúan a nivel energético, corrigiendo las alteraciones sin afectar el beneficio que otros productos generen en la persona que las reciba.

Tan importante ha sido el aporte de la terapia floral del Dr. Bach, que en 1976 la O.M.S. (Organización Mundial de la Salud), la reconoce como sistema médico y en 1983 publica en Medicine Traditionelle et Couverture des Soins de Santé, OMS Ginebra, p.162, un estudio dirigido a instituciones sanitarias recomendando su uso terapéutico.