Técnicas Curativas

Centro Fénix de Naturopatía




Centro Fénix de Naturopatía tiene el placer de invitarles a conocer sus técnicas curativas, probadas y usadas, con éxito, por miles de personas en todo el mundo, como remedio de síntomas contra la depresión, el estrés, la ansiedad.
Dolores musculares y deterioros articulares.
Problemas respiratorios y alergias.
Dependencias y adicciones.
Algias



Tels. (+34) 680 53 75 56 - (+34) 669 56 44 23 - España

Solo por Hoy


Sólo por hoy, me voy a conceder permiso...
para abrir un nuevo sendero;
para aprender una nueva forma de vivir.
Para dudar, para cometer errores.
Para reir, llorar, amar, reflexionar, descansar.
Para conocer la paz de la renuncia.


Sólo por hoy, me voy a conceder permiso...
para ser amable conmigo mismo.
Para honrar mi cuerpo, mi corazón, mi alma.
Para confiar en el futuro, en Dios, en mí.
Para venerar la vida que disfruto.
Para recordar quién soy.


Sólo por hoy...
Voy a encontrar el valor necesario
para mantenerme firme,
para escuchar,
para escuchar el susurro de mi corazón...
entre el sonido del trueno,
para cantar al viento.



Heart Singer





Centro Fénix de Naturopatía

Algunas Imágenes de este Blog, han sido sacadas de Internet. Si alguien tiene derechos y quiere que no salgan en este espacio, nos lo hacen saber y serán retiradas inmediatamente.



lunes, noviembre 16, 2009

Las Recompensas que se derivan de Enseñar

Ya hemos aprendido que todo el mundo enseña, y que enseña continuamente.

Es posible que hayas enseñado bien, pero que no hayas aprendido a aceptar el bienestar que te produce enseñar.

Si examinases lo que has enseñado, y cuán ajeno es a lo que creías saber, no podrías por menos que darte cuenta de que tu Maestro tuvo que proceder de más allá de tu sistema de pensamiento. Por tanto, Él pudo verlo objetivamente y percibir que no era cierto. Tuvo que haber hecho eso basándose en un sistema de pensamiento muy diferente, que no tiene nada en común con el tuyo. Pues ciertamente lo que Él ha enseñado y lo que tú has enseñado a través de Él, no tiene nada en común con lo que tú enseñabas antes de que Él llegase. Y como resultado de ello, has llevado paz allí donde antes había dolor, y el sufrimiento ha desparecido para ser reemplazado por la alegría.

Puede que hayas enseñado lo que es la libertad, pero no has aprendido a ser libre. Pues es indudable que te juzgas a ti mismo de acuerdo con lo que enseñas.

Las enseñanzas del ego producen resultados inmediatos porque aceptas sus decisiones inmediatamente como tu elección. Y esa aceptación significa que estás dispuesto a juzgarte a ti mismo de igual modo. Causa y efecto están claramente definidos en el sistema de pensamiento del ego, pues todo tu aprendizaje ha estado encauzado a establecer la relación que hay entre ellos. ¿Y cómo no ibas a tener fe en lo que tan diligentemente te enseñaste a creer? Recuerda, no obstante, cuánto cuidado has ejercido al elegir sus testigos, y cuánto al evitar los que hablan en favor de la causa de la verdad, y de sus efectos.

Es imposible enseñar eficazmente si se carece de convicción, y es igualmente imposible que la convicción se encuentre fuera de ti. Jamás podrías haber enseñado lo que es la libertad a no ser que creyeses en ella. Lo que enseñastes, pues, tuvo que haber procedido de ti. Sin embargo, es evidente que no conoces el ser que eres, y que no lo reconoces a pesar de que está activo. Lo que está activo tiene que estar presente y sólo si niegas sus obras podrías negar su presencia.

Has enseñado lo que eres, pero no has permitido que lo que eres te enseñe a ti. Has tenido sumo cuidado en evitar lo obvio, y en no ver la verdadera relación que existe entre causa y efecto, la cual es perfectamente evidente.

Dentro de ti se encuentra todo lo que has enseñado. ¿Qué parte de ti puede ser la que no ha aprendido? Tiene que ser esa parte que realmente es externa a ti la que no es lo que tú eres.

Las ilusiones no son sino creencias en algo que no existe. Y el aparente conflicto entre la verdad y la ilusión sólo puede ser resuelto separándote de la ilusión y no de la verdad.

Tú no eres dos seres en conflicto.

Si tú eres el universo, todo lo demás tiene que estar afuera, donde no existe nada. Has enseñado esto y, desde muy lejos en el universo aunque no desde más allá de ti mismo, los testigos de tu enseñanza se han congregado para ayudarte a aprender. Su fortaleza se ha unido a la tuya y a la del Espíritu para fortalecer tu fe en lo que enseñaste. Pues lo que enseñaste es verdad.

Si eliges estar solo, te excluyes a ti mismo de tu enseñanza y te mantienes separado de ella. Pero unido a ellos no puedes sino aprender que solamente te enseñaste a ti mismo, y que aprendiste de la convicción que compartiste con ellos.


Tu ser es digno de alabanza por lo que eres. Tarde o temprano todo el mundo tiene que construir un puente para salvar la brecha que se imagina existe entre sus dos seres.

Cada cual construye dicho puente, a través del cual salvará la brecha que le separa de su Ser, tan pronto como esté dispuesto a hacer un ligero esfuerzo por construirlo. Sus parvos esfuerzos están poderosamente respaldados por la fortaleza del infinito y por la voluntad conjunta que hacen que el infinito sea lo que es, al estar unidos dentro de él. Y así, todo aquel que está dispuesto a cruzar es literalmente transportado.

Tu puente está mejor construido de lo que te imaginas, y tus pies están firmemente asentados en él. No dudes de que la atracción de los que están al otro lado esperándote no te vayan a ayudar a cruzar sin contratiempos. Pues llegarás a donde quieres estar, y a donde te aguarda tu ser.

No hay comentarios: